Old Trafford dictará sentencia

El Real Madrid se jugaba el todo por el todo en esta competición y puso todos los medios y armas para que así fuera, pero en ocasiones el fútbol es caprichoso y el mejor no siempre gana. Welbeck adelanto a los "diablos rojos" tras rematar un corner botado por Rooney y Cristiano con otro cabezazo igualó el encuentro en la primera mitad. El resultado no cambió durante toda la segunda mitad y la eliminatoria queda abierta para el duelo en Old Trafford.

Salieron los hombres de Mourinho enchufados en el partido desde el primer minuto de juego a sabiendas de lo que estaba en juego. No tardaron en llegar las primeras ocasiones para los "blancos", la primera la tuvo Coentrao que probó fortuna tras recoger un balón en la frontal del área, pero apareció la mano salvadora de David De Gea para evitar el primer gol, no sin antes tocar el balón en el poste. Los primeros minutos de juego fue un auténtico vendaval de fútbol blanco que no se tradujo en goles. Cuando más cerca estaba el gol local, Welbeck a la salida de corner adelantaba a los de Ferguson. Siguió el Real Madrid igual tras el gol del inglés, y pronto encontró recompensa. Cristiano Ronaldo, máximo goleador de la Champions en este curso, aprovechó el sensacional envio de Ángel Di María para llevar la tablas al marcador con un extraordinario "testarazo". El cuarto de hora posterior al gol del portugués fue un continuo aluvión de oportunidades madridistas. Un Madrid que no concretaba y el Manchester que pedía a gritos el final de los primeros cuarenta y cinco minutos. Con tablas encararon los 22 protagonistas el túnel de vestuarios, un Madrid infinitamente superior a los hombres de Ferguson durante la primera mitad, pero que no supo aprovechar la gran cantidad de ocasiones de las que dispuso.

Esta fue la imagen que más se repitió durante el choque

Se inicio la segunda mitad, y el Madrid parecía que aun no había salido del vestuario, el Manchester cogió el testigo del juego y llevó serio peligro a la portería de Diego López durante los primeros cinco minutos de la segunda mitad. A partir de ahí, el Madrid volvió a llevar la riendas del partido, pero el guión fue bien distinto durante los segundos cuarenta y cinco minutos. Ferguson plantó dos líneas de cuatro bien replegadas al borde de su área y las intentonas ofensivas madridistas chocaban una y otra vez contra la muralla de hombres vestidos de rojo. Welbeck en ocasiones recordó al mismísimo Robison Crusoe, buscando recoger algún despeje de sus compañeros limitados a defender. A los "blancos" solo les quedaba probar fortuna desde la frontal y De Gea desbarataba cada uno de los disparos. Los hombres de Sir Alex intentaban llevarse un marcador más favorable a Old Trafford saliendo rápidos a la contra y a punto estuvo de conseguirlo Robin Van Persie en dos ocasiones, pero Diego López y Xabi Alonso evitaron que así fuera. El marcador no se movió en la segunda mitad, y queda todo por decidir para la vuelta el 5 de marzo en el "Teatro de los Sueños".